La amarga profecía de Intermón Oxman
Hace unas semanas se conocía el informe Crisis, desigualdad y pobreza de la organización Intermón Oxman. Esa era una de las conclusiones más desalentadoras para la economía y la sociedad española. Un alto porcentaje de la población pasará grandes dificultades dentro de una década.
18 millones de personas estarán en riesgo de exclusión social y pobreza en 2022
Las diferentes reflexiones de los expertos no se hicieron esperar. En una sociedad cada vez más preocupada por la actualidad, que asiste sorprendida a las variaciones de la bolsa o del desempleo, pocos parecen preguntarse qué sucederá en el futuro. Las consecuencias a largo plazo de esta crisis económica aun no se pueden valorar a ciencia cierta. Pero con conclusiones como la del informe de Intermón Oxman, podemos vislumbrar un futuro muy negro.
Y es que algún día el empleo volverá a crecer y la economía saldrá de los números rojos. La deuda pública descenderá y subirá el consumo. Pero, ¿qué habrá quedado por el camino? Los recortes de los derechos sociales son una realidad. El empeoramiento de los servicios públicos se recrudecerá. Enmascarando la necesaria racionalización del gasto público y de las empresas estatales se encuentra una realidad menos visible: el ciudadano estará cada vez menos protegido.
Además, las diferencias entre ricos y pobres serán aun mayores. “Antes de la crisis, el 20 por ciento más rico ingresaba 5,3 veces más que el 20 por ciento más pobre y en 2011 esta proporción había subido hasta el 7,5 y los datos recientes muestran que sigue aumentando. Haciendo comparativa con América Latina y si continua esta trayectoria en una década, el 20 por ciento más rico podría llegar a ingresar 15 veces más que el 20 por ciento más pobre”. Son palabras de José maría Vera, director general de Intermón.
Esta enorme diferencia de ingresos entre los más ricos y los más pobres traerá, probablemente, graves disturbios sociales, a menos que los más pobres, en riesgo de exclusión social, acepten su nueva condición alegremente.